lunes, 30 de mayo de 2011

Anti sonante la esdrújula del manifiesto: Fracaso Total

Tristemente reflexiono, con una rabia terrible tras haber leído el manifiesto del 15M y con una sensación de dominación de la izquierda al movimiento ciudadano que aunque lo viera con recelo, esperanzado quería equivocarme por el bien de todos y soñaba expectante con un cambio de tendencia surgido por esta acción espontanea, la cual podía tener en su mano la capacidad de generar en la sociedad el compromiso colectivo que necesita.
Las pretensiones han nacido más bien como consecuencia de los problemas bottom up en vez de visiones de cambio up to bottom. Sobre el manifiesto:
Llegar a la conclusión del despilfarro y la corrupción política es un hecho pero he aquí, que ni se plantea las listas abiertas, primer supuesto para el cambio a la nueva re-organización de las 17 tribus españolas. Además el ataque a la clase política es culpa de la sociedad, que se la merece, ya que premia en todos sus niveles el amiguismo en vez de la preparación o tecnocracia. No se trata de bajar los sueldos de los políticos sino elevarlos para atraer el talento, que se encuentra exclusivamente en manos de 8 compañías españolas.
Sobre la seguridad en el empleo y la vivienda, en vez de crear libertad y seguridad jurídica para los inversores, se crea una sensación de morirte con los pantalones puestos si eres empresario o la historieta de siempre "el regalo de la vivienda". Es de destacar el tema de la dación en pago, con la cual podría estar de acuerdo pero al fin y al cabo, crea injusticias respecto a los que responsablemente han asumido sus obligaciones.
Sobre la calidad de los servicios públicos, la gente debe empezar a viajar más y darse cuenta de lo que existe en otros países. Está claro que todo puede ser mejor ¿pero a costa de cuánto?. Por ello, es mejor obviar el comentario a este punto.
De los paraísos fiscales, decir que nunca van a desaparecer, y que la fuga de capitales es una cuestión utilizada e irremediable. Si quieres que el dinero no se vaya, debes hacer atractiva la propuesta para que en vez de irse el dinero se quede. Una de las medidas que yo personalmente propondría, sería levantar la mano y que se pudieran traer el dinero de estos paraísos sin penas, ni multas. En otro de los apartados, se habla de la fiscalización de las fortunas, vamos las de la clase media alta, puesto que las de clase alta, las sicavs etc.. conocen el sistema para retribuir menos y/o evadir. No es una cuestión de recoger más sino de administrar mejor.
Sobre el control de las entidades bancarias, algo me rechina. Se debe saber que Basilea y su homogenización va en aumento, desde un Basilea I light para ganar adeptos (más de 130 países) a un Basilea III para los 20´s, que obliga a un mayor peso estructural del capital interno, por ello lo que se debe exigir es más reglamentación y control por parte de las entidades supranacionales y no por los políticos nacionales. Del tema de los rescates a los bancos, soy de la teoría de que no se puede seguir entregando cheques en blanco, y lo digo tanto para España como para Irlanda y Portugal, van a tener que repartir perdidas con los acreedores. Claro que esta medida es anti social o ¿van a perder el dinero los de la cuenta de ahorro?. Por ello, esta bien y se debe fomentar aun más, el papel de los bancos centrales, puesto que este sistema de descontrol, en donde el fondo de pensiones va a comprar la deuda de españa, es un absoluto absurdo.
Sobre la entrada en el control de los partidos políticos, es inverosímil, pedir listas abiertas sí, pero lo demás carece de sentido. La separación de poder judicial, totalmente de acuerdo, pero todavía no se han enterado de las deudas de juego, ¿Bildu?. De los referéndums a las cuestiones europeas, deja claro que todavía nadie se ha enterado, ni entendido aquella frase de Ortega que decía “España es el problema Europa la solución”.
Sobre la cámara alta, está debería de tener las funciones originales para las cuales se creó y no un lugar de reposo de la esfera política para seguir cobrando sueldos. Dotarla de obligaciones, eliminando temáticas de las asambleas regionales y hasta eliminándo todas y cada una de estas cortes de taifas, ordenandose sus temáticas a una actuación exclusivamente de la cámara territorial nacional. Ojalá se redujera a unos pocos los cargos políticos, siendo todo lo demás de carrera profesional y oposición. La política debería tener un carácter de servicio y no de profesión. El modelo autonómico fracasa y el cambio de la ley electoral es necesario.
Por último dos notas, una el ataque a defensa, porque siempre queda bien, pero sin sacar los números porque es y da vergüenza. Y otra, el por debajo y de puntillas tema de la rebaja de la dotación en un 30% para partidos, fundaciones y sindicatos.. ¡Qué lástima!.... dejo esta última opinión, en manos del lector inteligente.