jueves, 13 de marzo de 2014

El maestro Antonio Palacios

La superación del 98 se hace a través de  la cultura y los cambios sociales que buscan abrirse paso hacia lo cosmopolita. Nuevas fórmulas y estructuras sociales nacen de la industria, se ha de dar paso a la modernidad, la capital que inicia el siglo con sólo 540.000 habitantes empieza a aumentar entre un 10% y un 20% cada 10años. Madrid está en movimiento.  


Metro de Madrid diseño de A.P.
Alumbrado, alcantarillado, obras monumentales que intentan dar prestancia y armonía, dar aspecto de gran ciudad Europea, de finos cocktails en el Ritz o en el Palace, o en aquel primer bar americano llamado maxim´s de Alcalá que tenía un gran negro libreado en su puerta; todo ello en contraste con ese viejo Madrid, el de zarzuela, el de los picaros y graciosos, el del vermouth y del rastro.
En arquitectura Madrid necesita encontrar muestras de orgullo para superar el desastre y lo hara con el estilo monterrey pronto con el modernismo en donde cuenta con arquitectos como Jose Grases Riera (casa de Amboage o Longoria), Reynals (casa Perez Villamil), Esteve (casino) o Antonio Palacios. Palacios es el Gaudi de Madrid. Un Madrid que busca la verticalidad, con su alma dividida entre lo nuevo y lo viejo, con las diferentes influencias arquitectónicas que se ven en los proyectos de la época a caballo entre el neoclasicismo como el de la academia de medicina, o el plateresco salmantino del palacio de Bermejillo, o el regionalismo, o toda este nuevo modernismo y eclecticismo cargado de nuevas influencias y uso de materiales.

"Nuestra señora de las Telecomunicaciones"

Antonio Palacios da esa identidad al eje de Castellana, decisivo en la nueva imagen será el famoso ayuntamiento - palacio de las telecomunicaciones que popularmente lo llamaron por su tamaño “Nuestra señora de las telecomunicaciones”, el círculo de bellas artes, el metro, el banco del Rio de la Plata (mi preferido).
Todas encuadradas para dar inicio a la Gran Vía. Con la conciencia de gran arquitecto y a sabiendas de que su obra perduraría, la gran concesión de Palacios es la de dignificar, elevar, y poner en contexto a la estampa de Madrid. Su obra también ha sido criticada, pero para su defensa, sus espacios son útiles, de gran distribución permitiendo su versatilidad tanto para lo que fueron creados como para otras opciones. Y es que cuando nos fijamos en el palacio de telecomunicaciones retranqueado para encuadrar la plaza y dar valor al resto del conjunto, vemos la idea de Palacios de realizar un monumento, y esa gran tarta plateresca llena de molduras no hace otra cosa que aligerar el símbolo ecléctico que pretende.  

Cada edificio requiere formas adecuadas y procedimientos constructivos propios, sin embargo una mirada no muy torpe descubrirá fácilmente en edificios muy distintos la mano del mismo arquitecto, lo que yo, gráficamente llamo las huellas dactilares”
Antonio Palacios

A. Palacios
No querría dejar de mencionar a muchos de los nombres que hay detrás de Antonio Palacios como su compañero y arquitecto Otamendi o el escultor Ángel García o el ingeniero Ángel Chueca (padre de Fernando Chueca). Aunque todavía no he descubierto el final de Antonio Palacios sé que se retiró a una pequeña casa al plantío diseñada por él, en este final encuentro informaciones contradictorias: no sé si murió en Valladolid o en su casa (la cual está en venta).


4 comentarios:

Anónimo dijo...

QUE PENA CAMBIAR A COMUNICACIONES SU BELLO NOMBRE POR LA GALLARDONADA CASPOSA E INSUFRIBLE DE "PALACIO DE CIBELES"

Isidro de Borja dijo...

Totalmente de acuerdo.. pero no te parece simpático y gracioso lo de "nuestra señora de las telecomunicaciones"..

Anónimo dijo...

MÁS QUE GRACIOSO ORIGINAL,¿ES OCURRENCIA TUYA?

Isidro de Borja dijo...

Para nada, es como la apodo en Madrid de Marisol y del organillo..