Cuando acaba el otoño.
En la madrugada de Londres a veces se oye el chispeo de la lluvia, las gotas golpean el techo y también lo hacen en la ventana, amaina el viento, luego vuelve con fuerza. Miro por el cristal y veo las antenas de televisión de los vecinos agitarse. La ira que cesa y de nuevo vuelve arrancarse.. El invierno ha llegado y quiere quedarse, abro uno de esos libros que nunca quieren acabarse, libro que se pasea por todas las maletas que llevo aunque nunca se decida ni a morir, ni a quedarse. Capítulo 10; aparco. Alcanzo la tablet, orbit y por fin el ABC/
Actualidad.
El mundo se ve
amenazado desde hace décadas y los Chamberlains buscan palabras que no llevan
al cielo. Imposible entre dos mundos tan distantes. Occidente marcado por una lucha
constante que lo ha llevado a una revisión constante de lo que representa el
hombre en el mundo desde dos vías, laica y religiosa, ambas logrando explicar
la idea de humanidad. Al Islam siempre le falto una iglesia, no solo en cuanto
a la interpretación sino mas bien en cuanto a unidad de destino.
Y entonces, pienso en otras cosas.
Mi primera
sobrina acaba de nacer en los desiertos de la gran arabia, es sagitario, y ha
nacido bajo el sólido sol del desierto. Lejanas tierras, su llanto es tenue,
frágil y hermoso. La protege el cielo. Crecer y saber que aunque pase todo en el mundo, siempre
habrá alguien por llegar. Viene al mundo de la multiculturalidad, un mundo que no
tiene mucho que ver con nuestras raíces pero que en el fondo se transcribe
igual, ¿si desconocen su pasado puede que se pierdan en el futuro? ¿Y como se crean raices a cientos de kilometros? ¿Como hacer que se identifiquen con nosotros? ¿Como darles experiencias parecidas a las que tuvimos a fin
de que puedan comprendernos?
Por hacer castillos en
el aire.
Me escribió mi Tío Juan, debía ser pronto, porque
las mañanas de cuentas en la corredera baja de san pablo deben ser de lo más firmes; y no existe
mayor firmeza que la de la mañana. ¡Se vende por fin la casa del numero 25! antes de
D. Pedro con sus altos ventanales en el principal y con su cochera de entrada
que pasa desadvertida y no pretender nada salvo ser una casa buena de un barrio de Austrias. Sé que te gustara.
Ya es la hora, el tiempo
marca.
Golpe de frio, agarro tu mano, me levanto con impulso como si no se notara la desgana. Llegar el primero. Marcar la hora,
otro café. Me acuerdo de las palabras de Pilar: ¡Y vos que sos! - Yo
escribo mails - Vos entonces sos un mailero..
Vuelta a la realidad. Me
gusta mi realidad.
#anosfelices