Santillana vestido de caballero de Santiago |
.. Pero Joaquín Santillana hizo patente el vigor de
su robusta personalidad discrepando en un punto accesorio de su maestro y en
otros fundamentales de la mentalidad común durante su tiempo. Fue para él la
política obligada actividad del servicio patriótico: utilizo sus dotes
intelectuales para mucho más que el lucimiento social: y dirigió explotaciones
agrícolas o empresas industriales no con vaguedades, aproximaciones o laxitudes
de aficionado, sino con estricta sujeción a los más inflexibles cánones de la
técnica profesional. …
Diputado
por Zumaya durante 25 años desde 1896, después senador, nunca se afilio a ningún partido, su
ideario era sencillo: católico, vasco e
independiente a los partidos, fiel a la dinastía reinante. Virtuosamente se
entendió con carlistas e integristas, siempre cuidado por la coalición liberal.
Desde
muy joven tuvo un papel principal para la corona, tras la guerra de cuba, la
reina regente se anticipo a iniciar la paz personalmente, enviando a Santillana
a tratar con el general Porter, embajador de EEUU en París, la negociación fue
aceptada. Sobre su postura política internacional, se confesó siempre bastante germanófilo aunque siempre abogo a favor
de la neutralidad de España en la I guerra mundial (abc 11sept 1914 primeraplana).
Fue
de los primeros que anteponiendo su fortuna a un bien común hizo grandes
empresas como fue la empresa de aguas Santillana que abasteció a Madrid, y cierto
es que por ello en Chamartín, Colmenar, Fuencarral y algún distrito madrileño le
dedicaron calles pero vivió lo suficiente para verse sustituido por sucesivos
titulares. Como curiosidad en Madrid capital, la cámara oficial de propietarios
acordó levantar un monumento en la glorieta de cuatro caminos, juzgando, y con
motivo, que a su esfuerzo se debía la existencia de tan populoso barrio, el
municipio coloco el pilón en la que iba a ser su propia avenida pero los
socialistas la dieron por nombre a la Av. pablo Iglesias y a la plaza del
pilón, plaza de Ruiz Jiménez. Aunque muchos años después la ciudad en
agradecimiento, le nombro hijo adoptivo de Madrid. Él siempre se declaro como
gran agricultor y regenero fincas en guinea ecuatorial, Córdoba, Jaén, Cuenca, Gerona,
Guadalajara, etc..
Rubén Darío, (Alfonso XIII, primer volumen de obras completas)
.. -Lo sabe y desea, por tanto que su patria se
regenere por el trabajo. Si su antecesor Felipe IV, en tiempos de musas y de
liras, gustaba de ser llamado “Un ingenio de esta corte”, a él le agrada que se
le distinga por “el primer agricultor de España”, y aplaude y estimula obras
como la de este admirable marqués de Santillana, fecundador de campos y creador
de riquezas, ciertamente grande entre los grandes de España.
SM Alfonso XIII con el duque del Infantado en Viñuelas |
Además
fue un gran restaurador de castillos, Viñuelas, Manzanares, los Mártires, Monclova,
Requeséns, Real colegio español de san clemente en Bolonia, hasta es curiosa la
compra de la Calahorra como respuesta ante el aviso de que el castillo iba a
ser vendido a unos americanos y que pieza a pieza se recompondría en una avenida
en Nueva York. Desde esta experiencia preparo proposiciones de ley para la
conservación de monumentos arquitectónicos y así evitar el espoleó de nuestros
tesoros artísticos por parte de otros países más afortunados.
En
1916 se le dio una compensación, que la prensa tanto de derechas como de
izquierdas titulo como "justicia de Rey", dándole el toisón de oro. También
fue nombrado presidente del consejo de las ordenes militares sucediendo al
infante Don Carlos, desde este cargo creó una biblioteca pública de genealogía
y heráldica abierta al público en la calle mayor y consiguió restablecer las
órdenes militares como regimiento nº77 (después de las cuatro cruces), convirtiéndose
en coronel honorario de Infantería, nunca participo como es lógico en
expediciones en África como si lo hiciera el regimiento.
En
la caída de la monarquía estuvo en palacio y sus hijos hicieron guardia turnándose
en el cuarto del príncipe de Asturias ante el miedo que suponía aquella masa arengada
en contra de la corona. Más tarde mientras sus hijos participaron en el golpe
de Sanjurjo, donde fueron detenidos y exiliados a Villa Cisneros, el duque se
encontraba en Zarauz, eso sí, con una orden de detención a domicilio. La
consecuencia directa fue lo perjudicado que salió en la confiscación de bienes
de los grandes de España. Aún así mantuvo, bastante campo
por las diferentes provincias de España y siete casas abiertas entre ellas el Palacio de Xifre en el paseo del Prado.
Cuando
el levantamiento, de Arteaga se encontraba en Granada, se traslado a Madrid en
el último tren que llego a la capital y encontró a sus hijos varones y fueron asilados
por Checoslovaquia y Noruega, tras estar escondido varios meses, pudo salir en
los primeros días del 37 por Alicante vía Marsella. Su hijo Borja murió en el
frente en la compañía llamada de Arapiles fusión de las ordenes militares de la
cual su padre era coronel. Otro de sus hijos Jaime también murió en la guerra
en aviación, Su primogénito, único varón que sobrevivió, hizo carrera militar hasta
ser capitán general y fue miembro del consejo de Don Juan. Sobre sus hijas destacar a Cristina de la Cruz hoy en proceso de beatificación. Ya mayor, por su peso
institucional fue nombrado por el jefe de estado como procurador de las cortes
españolas del año 43. Este fue su último cargo público. Su última empresa de la que fue presidente compañía española del golfo de guinea
ecuatorial.
Joaquín a sus 70 años |
Por
ser Casas que se rinden honores, Alba e Infantado se apadrinaron mutuamente en
varias ocasiones, Jimmy ocho años más joven que él, por su aprecio le solía
decir: Joaquín, tu a la derecha yo a la
izquierda; pero formamos entre los dos un partido único.
Escudo del XVIII duque del Infantado |
2 comentarios:
¡Estupendo artículo, gracias por publicarlo! El Duque del Infantado fue un auténtico personaje sobresaliente entre los de su clase.
Un saludo,
Alejandro.
Y mientras sus jornaleros y renteros muriéndose de hambre, como en Sartaguda.
Publicar un comentario