A janela sempre aberta..

Paseo por Pão de açúcar

En la playa de Rio donde ves sujetarse el Pão de açúcar, o tal vez en florianopolis, un gatopardiano conoció a Wagner, un gelandihno que conocía bien las tácticas y la relación con la mujer.

Aquel gran malandro rubio, miro muy fijo casi sin pestañear, luego se encorvo y poco a poco subió los hombros haciendo ver con su cuerpo que la vida era simple y tal cual era; y en una voz suave y seseante dijo:

“Ela é como una passarinha dentro de una jaulha, com una janela fechada o passarinha sempre quer Sair! Mais... Quando a janela fica aberta... o passarinho sai PA Fora...  MAIS.. sempre volta para casa"

Nos descubrió a los mortales la gran teoría de la jaulha siempre abierta, un remanso de paz y comprensión para la mente del hombre. Mi teoría de siempre “si encuentras algo mejor cojéelo” se desbancaba por una visión menos teatral - con más vitalidad, fuerza y frescor. Comprender que el mundo gira y que se repite, sin forzar la circunstancia y que las cosas vuelven como el agua a los ríos y la cabra al monte, ¡era entender demasiado!

Antiguas teorías de no minusvalorar la historia de amor, “del todo o nada”, porque sino no respetábamos nuestras propias apuestas y estas eran el no creer suficientemente en nosotros mismos, hicieron que el amor romántico pudiera pasar a la incomprensión y por tanto a no ser digerido - convirtiéndonos en auténticos ríos de ceniza (Azenbush). Seres más parecidos al desencanto de una canción de Nacho Vegas que al descubrimiento del camino que es la vida.

Todos necesitamos comprender y descubrir, necesitamos darnos cuenta para poder valorar las cosas que ya tenemos, así como para reafirmar actitudes, compromisos personales y decisiones de hacia donde vamos y quienes queremos ser, tratar de aprender a conocernos y saber exactamente lo que deseamos. Es quitarnos los miedos y las inseguridades para andar firme cuando se debe. Esta formula conlleva perder un poco de inocencia y mucha ingenuidad, conlleva entender que no dominas tu vida pero que lo único que puedes hacer es mantenerte firme en las tormentas y no resignarte nunca.

Déjame por último dar un buen consejo: pon una buena imagen de cine a todo ello, porque dar un buen lugar a un recuerdo es una imagen que nadie nos puede borrar. Pon una buena canción, ponla muy alta y baila.